En verdad siento una gran admiración por los valientes, pero más admiración siento por los cobardes. Yo, tímido, frágil, casi cristal, incapaz de soportar el miedo más que unos minutos, me aterroriza la mera idea de vivir con miedo. Solo un temerario viviría asustado.
P.D: estoy en Málaga. No más preguntas.
1 comentario:
¡Ánimo valiente! ;)
Publicar un comentario