- Han pasado 43 noches. Para mí, como ayer mismo: una eternidad.
(Silencio).
Aprieta los ojos. No ve. La niebla borra las montañas.
¡Quizás es eso!
Nunca la había recordado así,
¿Cómo?
tan muda,
¡habla!
tan sorda,
¡ escucha!
tan lejana...
¡está ahí!
¿tan muerta y tan callada?
.......
(no hay reproche)
Sigue sin respuesta. Las esperanzas se consumen en un balcón y, poco a poco, se desdibujan del recuerdo. Quizás, detrás de la lluvia, no había nada.
1 comentario:
hola! hace tiempo que no escribía una entrada y hace tiempo que no leía una, y olvide por un instante lo bien que me hace sentir leer algo tuyo, es como amm muy tranquilo..buen día =)
Publicar un comentario